REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
PODER JUDICIAL
Circuito Judicial del Tribunal de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas y Nacional de Adopción Internacional
Sala de Juicio Nº 12
Caracas, dieciocho (18) de diciembre de dos mil diez (2010)
199º y 150º
ASUNTO: AP51-V-2009-016601
PARTE ACTORA: GILMA GARCÍA SARMIENTO, venezolana, mayor de edad, de este domicilio, titular de la cédula de identidad No. V-19.018.179.
PARTE DEMANDADA: JOSÉ FRANCISCO AGUILAR, venezolano, mayor de edad, de este domicilio, titular de la cédula de identidad No. V-17.541.600.
REPRESENTANTES JUDICIALES:
PARTE ACTORA: Abogada IRDE CAPOTE MENDOZA, Fiscal Nonagésima Segunda (92°) del Ministerio Público de la Circunscripción Judicial del área Metropolitana de Caracas.
PARTE DEMANDADA: No constituyó representación alguna.
ASUNTO: Fijación de Obligación de Manutención.
Se da inicio a la presente solicitud de fijación de obligación de manutención, mediante escrito presentado por la ciudadana GILMA GARCÍA SARMIENTO, venezolana, mayor de edad, de este domicilio, titular de la cédula de identidad No. V-19.018.179, en fecha 06 de octubre de 2009, quien actuó en nombre y representación de su hijo, debidamente asistida por el Abogado IRDE CAPOTE MENDOZA, Fiscal Nonagésima Segunda (92°) del Ministerio Público, en la cual expuso:
Que el padre de su hijo ciudadano JOSÉ FRANCISCO AGUILAR, venezolano, mayor de edad, de este domicilio, titular de la cédula de identidad No. V-17.541.600, no puede cumplir con el monto requerido por ella; razón por la cual procedió a demandar por fijación de obligación de manutención al ciudadano JOSÉ FRANCISCO AGUILAR.
En fecha 08 de octubre de 2009, este Tribunal admitió la presente demanda de fijación de Obligación de Manutención. Folio 8 del expediente.
En fecha 26 de noviembre de 2009, este Tribunal libró boleta de citación al ciudadano JOSÉ FRANCISCO AGUILAR. Folios 15 y 16 del expediente.
En fecha 10 de diciembre de 2009, compareció el ciudadano ALBERTO QUINTERO, en su carácter de Alguacil adscrito a este Circuito de Protección y consignó boleta de citación debidamente firmada por el accionado. Folios 30 y 31 del expediente.
En fecha 15 de diciembre de 2.009, la ciudadana ADRIANA MIRELES, en su carácter de Secretaria de este Tribunal, dejó constancia de haberse citado a la parte accionada. Asimismo, dejó constancia que a partir de esa fecha debía computarse el lapso, a los fines de la celebración del acto conciliatoria entre las partes. Folio 32 del expediente.
En fecha 19 de enero de 2009, se dejó constancia que en fecha 18 de enero de 2009, ninguna de las parte compareció a la reunión conciliatoria, así mismo el ciudadano JOSÉ FRANCISCO AGUILAR, no dio contestación a la presente demanda. Folios 33 y 34 del expediente .
Vencido el lapso probatorio, el Tribunal pasa a decir la presente controversia y para ello observa:
En el presente caso la ciudadana GILMA GARCÍA SARMIENTO, venezolana, mayor de edad, de este domicilio, titular de la cédula de identidad No. V-19.018.179, demandó por la fijación de la obligación de manutención, al ciudadano JOSÉ FRANCISCO AGUILAR, venezolano, mayor de edad, titular de la cédula de identidad No. V-17.541.600, en beneficio de su hijo, de conformidad a lo establecido en la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente.
El Tribunal pasa a analizar las pruebas aportadas en el presente juicio, previa las siguientes observaciones:
1.- Por certeza de la copia del documento público que prueba la filiación del niño y los ciudadanos GILMA GARCÍA SARMIENTO y JOSÉ FRANCISCO AGUILAR ARDILLA, este Tribunal le da valor probatorio de conformidad a los artículos 1.357 y 1.359 del Código Civil, en concordancia con el artículo 429 del Código de Procedimiento Civil. Folio 4 del expediente.
2.- Por certeza la constancia de trabajo que prueba la relación laboral existente entre el ciudadano JOSÉ FRANCISCO AGUILAR ARDILLA y Excelsior Gama Supermercados C.A, así como la capacidad económica del precitado ciudadano, este Tribunal le da valor probatorio de conformidad con el artículo 431 del Código de Procedimiento Civil.
Ahora bien, este Tribunal observó que citado personalmente el accionado, éste no compareció, ni por sí, ni por medio de apoderado a dar contestación a la presente demanda, de lo cual se deduce que se configuró en su contra una presunción iuris tamtun de confesión ficta conforme a lo establecido en el artículo 362 del Código de Procedimiento Civil, el cual establece: “Si el demandado no diere contestación a la demanda dentro de los plazos indicados en este Código, se le tendrá por confeso en cuanto no sea contraria a derecho la petición del demandante, si nada probare que le favorezca. En este caso, vencido el lapso de promoción de pruebas sin que el demandado hubiese promovido alguna, el Tribunal procederá a sentenciar la causa, sin más dilación, dentro de los ocho días siguientes al vencimiento de aquél lapso, atendiéndose a la confesión del demandado. En todo caso, a los fines de la apelación se dejará transcurrir íntegramente el mencionado lapso de ocho días si la sentencia fuere pronunciada antes de su vencimiento.”
De manera que, conforme a la transcrita disposición Legal, debe este Tribunal examinar sí además de la contumacia de la codemandada a dar contestación de la demanda en el lapso legal previsto para ello, el accionado en el lapso probatorio, probó algo que le favoreciera y si la petición contenida en la demanda es o no contraria a derecho, ya que la casación, en Sentencia de fecha 19 de junio de 1996, en el juicio de Maghglebe Landaeta Bermúdez contra la Compañía Nacional Anónima de Seguros La Previsora, expreso:
“En el proceso cuando el demandado no comparece a dar contestación a la demanda, el artículo 362 establece en su contra la presunción iuris tantum de la confesión. Esta presunción admite la prueba limitada del demandado rebelde, aquello que enerve la acción de la parte actora, más no puede hacer uso de pruebas que recaigan sobre las excepciones que no opuso en la oportunidad legal de la contestación de la demanda.
Vencido el lapso de promoción de pruebas, sin que la parte demandada promueva alguna que le favorezca, la confesión queda ordenada por la Ley, no como presunción, sino como consecuencia legal, por haberse agotado la oportunidad de probanza, aún en contra de la confesión. Ya el Juzgador, no tiene por qué entrar a conocer si la acción es o no procedente, si son veraces o falsos los hechos y la trascendencia jurídica de los mismos, sino que constatado que la pretensión no está prohibida por la Ley, lo cual es un hecho negativo, debe decidir en atendiéndose a la confesión del demandado...
En el caso de confesión ficta, la doctrina de Sala ha establecido que si en los elementos probatorios aportados por la parte actora existe prueba en contrario a los hechos alegados en la demanda, debe declararse ésta sin lugar...”
Trasladadas las anteriores consideraciones en el caso de autos, observa esta Sentenciadora que la parte demandada, no dio contestación a la demanda y durante el lapso probatorio no presento prueba alguna que le favoreciera para desvirtuar los alegatos de la accionante. Asimismo se observó que la presente acción no es contraria a derecho, y que los elementos probatorios aportados por la parte actora no existen pruebas en contrario a los hechos alegados en la demanda, que impida que la misma sea declarada con lugar, por lo que la declaratoria de la confesión ficta en el presente caso resulta procedente. Y así se declara.
Seguidamente, analizadas las pruebas evacuadas, este Tribunal observa:
La Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente prevé en el Titulo IV Capitulo VI un procedimiento especial único para resolver los asuntos relativos a los alimentos, el cual tiene derivados que son recogidos por disposiciones agrupadas en la parte sustantiva de la institución como son la fijación, revisión y el cumplimiento de la obligación de manutención de acuerdo a la pretensión de quien la reclama y siempre que se den los supuestos legales correspondientes en cada caso.-
Para fijar el monto de la obligación de manutención, el Juez debe guiarse por el dispositivo de los artículos 365, 366 y 369 de la Ley Orgánica Para la Protección del Niño y del Adolescente. Siendo que la obligación de manutención es un deber compartido entre ambos padres, nuestro cuadro normativo ha previsto que cuando el hijo se encuentra bajo la guarda de uno solo de ellos, el Juez fijará el monto que deba pagar el otro progenitor para coadyuvar a la manutención y desarrollo integral del mismo. Ahora, como quiera que el niño, vive con su madre, es necesario fijar el monto de obligación de manutención, acorde con la capacidad económica del ciudadano JOSÉ FRANCISCO AGUILAR.
Esta obligación corresponde a ambos padres en la medida de sus capacidades; en el presente caso, las necesidades del niño, quedó demostradas que por su edad y su condición física que la incapacita para proveérselo por sí misma, requiriendo de la ayuda de sus progenitores. La madre, de conformidad a lo establecido en el artículo 282 del Código Civil, en concordancia con el artículo 366 de la Ley Orgánica Para la Protección del Niño y del Adolescente, está obligada conjuntamente con el padre a contribuir con los gastos de manutención; pero la madre con el sólo hecho de la convivencia con las adolescentes de autos, está contribuyendo en gran parte con los gastos de ésta. Así se declara.
En relación a la capacidad económica del ciudadano JOSÉ FRANCISCO AGUILAR, este Tribunal observó la constancia de trabajo promovida por la parte actora en su escrito libelar, el cual se desprende que el ciudadano JOSÉ FRANCISCO AGUILAR, devenga un ingreso fijo mensual, siendo este capaz de poder responder de manera acorde a las necesidades que tiene su hijo, en cuanto a la obligación de manutención. Así se declara.
Este Tribunal del análisis de las pruebas se evidenció que el niño, tienen necesidad y derecho de desarrollarse de manera integral, a lo que el padre está obligado a proporcionárselo de acuerdo a su capacidad económica y bajo esas directrices, el Tribunal determinó el quantum alimentario, a favor del adolescente autos, de conformidad a lo establecido en el artículo 369 de la Ley Orgánica Para la Protección del Niño y del Adolescente. En consecuencia, esta demanda debe prosperar. Así se decide.
En merito de las anteriores consideraciones, esta Juez Unipersonal No. XII, de la Sala de Juicio del Tribunal de protección del Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial de Área Metropolitana de Caracas, en Nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por autoridad de la Ley DECLARA CON LUGAR la presente demanda de fijación de Obligación de Manutención, incoada por la ciudadana GILMA GARCÍA SARMIENTO, venezolana, mayor de edad, de este domicilio, titular de la cédula de identidad No. V-19.018.179, en contra del ciudadano JOSÉ FRANCISCO AGUILAR, venezolano, mayor de edad, de este domicilio, titular de la cédula de identidad No. V-17.541.600, en consecuencia se fija como obligación de manutención mensual que debe suministrar el ciudadano DOUGLAS ALEJANDRO LEON, titular de la cédula de identidad No. V-6.189.316, a su hijo, el equivalente al 62,98 % del Salario Mínimo Urbano, es decir, la cantidad de Seiscientos Nueve Bolívares Fuertes con Veintiséis Céntimos (Bs. F. 609, 24), tomando como base el salario mínimo el cual para la fecha es de Ochocientos Setenta y Nueve Bolívares con Siete Céntimos (Bs. F, 967,07), según Decreto No. 6.660, formulado por el ejecutivo nacional, publicado en Gaceta Oficial No. 39.153, de fecha 3 de abril de 2.009, que para los efectos de la Obligación de Manutención, deberá ser ésta la determinante de la misma. Este monto de manutención deberá ajustarse en forma automática anualmente, teniendo en cuenta la tasa de inflación determinada en los índices del Banco Central de Venezuela, pero siempre dentro de los parámetros establecidos, es decir las necesidades del niño y la capacidad económica del obligado. Igualmente se establece dos (2) bonificaciones, una el mes de agosto por concepto de bono escolar y otra el mes de diciembre como bonificación especial de fin de año, equivalentes cada una a la cuota de manutención, es decir la cantidad de Seiscientos Nueve Bolívares Fuertes con Veintiséis Céntimos (Bs. F. 609,24). Las cantidades fijadas por concepto de obligación de manutención, deberá cancelarla directamente el accionado a la ciudadana GILMA GARCÍA SARMIENTO, en partidas quincenales, cada una por la mitad del equivalente a la manutención fijada. Así se decide.
La fijación de la obligación de alimentos en salarios mínimos, tiene por objeto servir de referencia para el cálculo del monto alimentario, en forma que sea de todos conocida, tal como lo expresa la Ley Orgánica Para la Protección del Niño y del Adolescente en su Exposición de Motivo, sin que ello signifique que si aumenta el salario mínimo, aumente también la cuota de manutención; y así se decide.
PUBLIQUESE y REGISTRESE:
Se ordena notificar a las partes de la sentencia aquí proferida, en virtud de haberse publicado fuera del lapso de ley, a objeto de que interpongan los recursos de ley.
Dada y sellada en la Sala de despacho del Tribunal de Protección del Niño y del Adolescente de la Circunscripción Judicial del Área Metropolitana de Caracas. Juez Unipersonal No. XII. Caracas, a los 18 días del mes de febrero de 2010. Años 199° y 150°.
La Juez
La Secretaria
Abg. Sara Guardia Soto
Abg. Adriana Mireles
La anterior sentencia fue publicada en horas de despacho en esta misma fecha.
La Secretaria
Abg. Adriana Mireles
AP51-V-2009-016601
SGS/AM/Héctor Marín
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